Zorrorífico y Detective Murciano: La imagen es el mensaje

Zorrorífico y Detective Murciano no pasan desapercibidos. Si te los cruzas, no sabes si van a un rodaje de Blade Runner o si acaban de salir de una rave a las 8 de la mañana. Su paso por La Revuelta fue un buen ejemplo de eso: la televisión todavía no estaba preparada para su estética, pero ahí estaban, plantados en prime time como si eso fuera lo más normal del mundo. Resultado: confusión, fascinación y un montón de comentarios en redes. Pero, ¿hasta qué punto la imagen manda en todo esto?

Vestirse como si el mañana no existiera

Desde que aparecieron en televisión, todo el mundo ha opinado sobre su imagen. Que si parecen personajes de un videojuego, que si se han puesto lo primero que han encontrado en un mercadillo, que si es parte de su arte. La realidad es simple: se visten como les da la gana.

«La primera impresión que tuvieron de mí fue las pintas que llevaba», dice Zorrorífico. Y sí, eso fue suficiente para que la gente hablara de ellos. En un mundo donde todxs quieren destacar, ellos lo han conseguido sin esfuerzo. O con mucho esfuerzo, quién sabe, quizás Zorrorífico tarda más de lo que nos pensamos para elegir su outfit.

La fama en la era del meme

Aparecer en la tele te cambia la vida… o al menos el algoritmo. La Revuelta les puso en el radar de muchísima gente, pero también les dejó con una etiqueta difícil de quitar. “Por desgracia, esa etiqueta es muy difícil de quitar porque es un programa de máxima audiencia”, explican. Y es verdad, una vez que te han etiquetado como «el de La Revuelta», da igual que saques una sinfonía en do menor, la gente seguirá comentando sobre tus pintas cuando te recuerden diciendo «si, sí, esos chavales de Murcia». Pero, ¿qué más da? Internet tiene memoria de pez y en dos semanas habrá otro tema del que hablar. Lo importante es que esta exposición mediática los ha conectado con más chavales como ellos, los ha conectado con su tribu espiritual.

¿Un golpe de suerte? ¿Puro talento? ¿Un pacto con una entidad cósmica? Probablemente un poco de todo. Lo que está claro es que la exposición mediática puede darte un empujón, pero mantener la relevancia es otro rollo. «Antes me tardaba un mes en conseguir 200 visitas; ahora, en menos de una semana, tengo 1000», dice Zorrorífico.

Al final, Zorrorífico y Detective Murciano no buscan gustarle a todo el mundo (y menos mal). Su identidad está en su música, su estética y en hacer lo que les da la gana. Y aunque la televisión y las redes pueden lanzar una carrera, lo que realmente importa es lo que viene después. Ellos lo saben y, de momento, siguen jugando en su propio terreno. ¿El futuro? Seguro que es raro, inesperado y con muchos limones de origen murciano.