Si piensas que los tattoos de Tanner Clark son un cúmulo de decisiones aleatorias, piénsalo otra vez. Puede que a simple vista su piel parezca un collage de estilos sin relación, pero hay un método detrás de lo que parece puro caos. Tanner no es solo un tipo cubierto de tinta; también es tatuador y sabe perfectamente lo que está haciendo. O eso creemos porque la verdad, le quedan bastante bien los tattoos.
Lo que está haciendo es blastover. El blastover es una técnica que consiste en tatuar sobre tatuajes ya existentes, superponiendo diseños y creando una composición que juega con lo que ya hay en la piel. No es simplemente tapar un tattoo antiguo con otro, sino aprovechar las capas para generar un efecto visual con intención. Y Tanner lleva esto al extremo, combinando estilos y grosores de línea para mantener un equilibrio en el aparente desorden.
Uno de los elementos más llamativos de sus tattoos es la variedad de estilos que conviven en su cuerpo. En la cabeza, lleva un diseño cibersigilista, un estilo que evoca simbolismo oculto y estética digital. En el pecho y las manos, predominan patrones y texturas con un aire grunge e industrial. Por si fuera poco, se ha tatuado lettering bold en el costado, creando un contraste brutal con los otros elementos.
Pero esto no acaba ahí. Entre toda esta mezcla, aparecen referencias religiosas como un Jesús y otros símbolos espirituales, combinados con cráneos, flores y detalles en ignorant style. También hay tattoos con aire más experimental y piezas que, por sí solas, parecen no tener relación entre sí.
Sin embargo, cuando miras el conjunto, todo encaja. ¿Por qué? Porque hay un plan. Tanner no está acumulando tattoos al azar. Está utilizando su cuerpo como un lienzo en el que cada elemento se superpone al otro para crear una estética única.
Lo que hace que este caos aparente funcione es su habilidad para mezclar contrastes de una forma armónica. Usa grosores de línea diferentes, juega con la densidad de la tinta y aprovecha las áreas de piel libre para que los elementos respiren. Además, el uso de lettering bold en lugares estratégicos ayuda a romper la composición y darle un sentido de estructura dentro de la anarquía visual.
Este enfoque no es para cualquiera. No todos los tatuajes pueden soportar una capa de blastover sin que la piel parezca sobresaturada. Pero en el caso de Tanner, su técnica consigue que cada capa agregue más profundidad en lugar de ensuciar el diseño. El resultado es una estética grunge e industrial, con una fuerza visual que atrapa la mirada.
Estos de aquí son sólo algunos de los tattoos que hace:
El blastover no es nuevo, pero en los últimos años ha ganado popularidad dentro de ciertos círculos del tattoo. Artistas experimentales y amantes del estilo grunge están explorando esta forma de tatuar para transformar por completo su imagen. Sin embargo, en el caso de Tanner, esto no parece solo una tendencia pasajera. Su manera de combinar estilos y de conceptualizar el tatuaje como un proceso en constante evolución sugiere que esto es más que una moda: es su identidad.