Olivia Misssy, la mujer tras la imagen pública
No intentes entenderla. Sólo disfruta de la entrevista a Olivia Misssy, una figura de múltiples facetas que fusiona la moda, la música y el entrenamiento en una mezcla tan única como sensual.
Más allá de su imagen pública de “bad b*tch”, Olivia revela una realidad más íntima: una personalidad afectuosa y conectada con sus animales, con un gusto por los placeres simples como el chocolate, los juguetes sexuales y, de vez en cuando, alguna “pill”. Esta dualidad entre la percepción pública y la realidad personal es un reflejo de su autenticidad y complejidad.
Su carrera comenzó en las entrañas de la vida nocturna como camarera, luego en una discoteca y, finalmente, como gogó, marcando el inicio de su inmersión en el entretenimiento nocturno y la moda. A través de su experiencia, Olivia ha aprendido a canalizar sus impulsos hacia su identidad artística, que también se refleja en sus numerosos tatuajes. Cada tatuaje, desde el “Aries” en su rodilla hasta símbolos de su familia y mascotas, cuenta una historia personal. Algunos como el primero, que se hizo junto a su mejor amiga, fueron decisiones impulsivas que hoy simbolizan la efimeridad de la vida.
La moda es otro campo en el que Olivia ha dejado su impronta. Su marca de ropa, “Oh! Misssy”, está inspirada en la sensualidad de las gogós y se produce localmente en Barcelona. También utiliza OnlyFans, una plataforma que para ella no es más que otra fuente de ingresos.
A la hora de reflexionar, Olivia aconsejaría a su yo de 15 años que confiase en sí misma y que delegase responsabilidades para una mejor organización. Enfatiza que la imagen pública a menudo oculta la realidad, y aboga por la autenticidad frente a las presiones sociales.
Inspirada por su padre, un melómano con su propio estudio, desde que era pequeña se sintió conectada a la música y recientemente ha comenzado su carrera como DJ.
En la intimidad de esta entrevista, Olivia Misssy ha revelado su secreto para una vida plena. Una vida en la que la moda, el cuerpo y la autoaceptación se entrelazan en un constante diálogo de autoexpresión. Su mantra: “vivir y dejar vivir”. Para Olivia la buena vida es vivir sin disculparse ni justificarse. Ella es como es, y disfrutar de su identidad es su mayor regalo, su liberación.
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